"Recibir el diagnóstico causa mucho miedo, es retador, pone a prueba la fe y la fortaleza que tenemos. Hay cuestionamiento de ‘¿por qué a mí?’. Encontrar al grupo craneofacial nos llenó de esperanzas. El proceso fue súper amigable y lindo."

"Es un diagnóstico que jamás esperas. Sientes que se detuviera el mundo por un momento. Sentimos mucho miedo, nos preguntamos ‘¿por qué a nosotros?’, qué consecuencias tendría para su desarrollo y cómo someterlo a una cirugía tan pequeño. Después de pasar por la negación, la tristeza y el miedo, entendimos que la cirugía era necesaria, pero también que era muy segura en manos expertas."

"La cirugía es un reto emocional, pero gracias a Dios y al equipo médico todo salió muy bien. Verlo despertar con sus ojitos buscando los nuestros fue el momento más hermoso."

"La recuperación fue más rápida de lo esperado. Los bebés tienen una fuerza y una capacidad de recuperación sorprendentes."

"Estábamos en manos de un excelente grupo profesional. Llegamos con miles de preguntas, pero al escuchar a los doctores, todas desaparecieron. Uno solo atiende, escucha y confía."

"Nos dan la información de manera asertiva, tranquila y con mucho conocimiento."

"Su cabeza al otro día ya se veía distinta. Todo cambió en él."

"El doctor es un papá con los niños: los cuida como si fueran de él, está pendiente de que no sufran ni sangren. Es muy bueno en lo que hace."

"Como papás sentimos miedo y buscamos cosas en internet. La invitación es a no hacerlo y dejarse guiar por los médicos."

"Confiemos en Dios o en el ser supremo que tengamos, y después en los doctores. Estamos en las mejores manos."

"Dejar al bebé en el quirófano es muy duro como padres, pero sabemos que están en las mejores manos."

"El cambio en la cabeza de los bebés es inmediato. Es muy bonito superar la prueba, ver los resultados y saber que no hay ninguna afectación para su desarrollo."

"No es fácil decir que todo va a estar bien, pero con la seguridad de que sí lo estará. Porque estuvimos en sus zapatos, podemos decir que están en las mejores manos, es el mejor grupo de médicos, no solo por la trayectoria y experticia médica, sino por la calidad humana. Nunca nos habíamos sentido tan bien acogidos por un equipo médico."

"El miedo se apodera de nosotros, pero el equipo médico, sin conocernos, sin estar en el país, sin enviar nuestra póliza de salud, nos dio respuesta y nos ayudó."

"Durante todo el proceso siempre estuvieron pendientes de nosotros. No solo en la parte médica, sino que también nos apoyaron con los trámites administrativos."

"Siempre nos hicieron sentir que el caso de nuestra hija era especial. Aunque hayan operado cientos de niños, nos hicieron sentir que el nuestro era único. Sentimos que para el grupo médico era igual de importante que para nosotros como papás."

"Durante la cirugía todo el personal fue increíble. La anestesióloga se sentó conmigo mientras estaba ahogada en llanto y me dijo que me tranquilizara. Me habló como mamá, y sus palabras fueron súper importantes y reconfortantes."

"Cuando a un hijo le diagnostican algo, uno siente que se le va la vida. Pero ahí es cuando uno encuentra personas que son ángeles, y la ciencia que es un milagro"

"Tuvimos mucho acompañamiento."

"Es un diagnóstico extraño que solo conocemos quienes hemos pasado por esto."

"Los médicos saben lo que hacen. Tienen técnicas modernas, menos dolorosas y menos invasivas."

"Ofrecen manejo integral con neurocirujano y cirujanos plásticos."

"Los niños están en las mejores manos. Son días de incertidumbre y muy fuertes; no queremos que nadie toque a nuestros bebés, y menos para una cirugía. Pero estamos en las mejores manos."

"El grupo de profesionales es muy bueno."

"Las cicatrices quedan muy bien. Explican muy bien los cuidados que debemos tener."

"La cirugía para nuestro hijo es un milagro."

"Este equipo es impresionante. No pudimos estar en mejores manos."

"Como padres, agradecemos la forma en que los médicos afrontan el proceso y cómo dan la seguridad de que todo va a estar bien."

"Si estás atravesando un diagnóstico como este, no estás solo. Es completamente normal sentir miedo, pero también es posible encontrar claridad, apoyo y mucha esperanza. Confíen en su intuición, en el equipo de médicos y, sobre todo, en su bebé: son mucho más fuertes de lo que imaginamos."